A veces se me antoja quererte a mi manera
con rabia con desdeño, o humildad y sencillez
y yo consigo odiarte, porque éste amor no espera
y siento que me duele muy hondo allá en mi ser.
A veces se me antoja tenerte entre mis brazos
que mis manos te acaricien, ya no sentir dolor
y al ver que no te siento durmiendo en mi regazo
te veo imaginario, brindándome tu amor.
A veces sin criterio, te pienso en otros brazos
y te brindan el consuelo que te dan por mi perdón
afloran sensaciones que mi cuerpo justifica,
pero mi mente aún me grita, no desesperes no.
NOVIA DE LOS MONTES
viernes, 8 de febrero de 2008
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