martes, 13 de noviembre de 2007

CONFESIÓN DE AMOR



En esta carta, que por fin hoy, me decidí a enviarte
Que un día, para ti escribí, pero no te di, quizá por cobardía
Allí te confieso con valentía, lo que nunca quise decirte
Rompo el silencio y decirte quiero lo que por ti, tu amiga sentía.

Cuando en toda tristeza, tú involucrabas tragos de vino
Y mil cigarrillos, tu te fumabas, sin importar que tu vida apagabas
Olvidar querías todas las penas que te causaba ese amor ingrato que tanto amabas
Y yo contigo, tus enojos los compartía, en mi hombro amigo.

Con mucho tacto te proponía,
Cambiar de amores, porque tú con ese te destruías.
Noches en vela viví contigo, claros desvelos en noches frías
Y muchos cuentos, como a un pequeño, yo te decía.

Recuerda el día que tú morías, y en tu amargura te consumías
Porque encontraste, ese amor lindo que idolatrabas
En brazos fuertes, de otro amor querido, que tú jamás imaginarías
Y en desespero cogiste un arma, para matarlo, por robar tu amada
Y en tu guardiana me convertía, y te persuadí, de que ella para ti, no valía nada.

Pues esa noche, era el momento, para decirte mi amor callado
Pero te vi tan ofuscado, que mejor quise, dejarte solo para que así tú te calmaras
Y ¡Qué pena siento!, porque ese día, tú te entregaste al viejo rol del licor y la copa
Y alejé mi hombro, encogí mi mano, ya para ti, ya nunca estaba.

Y me ausenté, ya nunca quise saber de ti, pues te dejaba en un mar de ahogo
Con tus tristezas y tus nostalgias, sin confesarte mi amor secreto que me quemaba.
Y hoy que supe que estás a un paso de dejar el mundo por los estragos que te dejó el vino
Callar más no quise, y de momento supe, que saber tenías, que fuiste tú, el primer hombre que más yo amaba.

Novia de los Montes


No hay comentarios: